Al practicar artes marciales se debe tener la indumentaria de protección necesaria, entre la que se encuentra el casco para karate. Este se diferencia de los clásicos cascos de boxeo al tener su protección en la parte superior y trasera, además de la normal al frente y a los lados.
La homologación de los cascos de karate dice que deben ser acolchados en toda la cabeza, poseer tiras elásticas que lo mantengan sujeto, y colocar una máscara de plástico junto al sello de homologación en la parte de delante. Estos cascos son de color blanco generalmente.
Después de cada entrenamiento o competencia, es recomendable airearlos para que se sequen y no tengan malos olores posteriormente. No se deben dejar secar al sol, ya que puede dañar el material del que están elaborados.
¿Cómo saber la talla del casco para karate?
Algunos modelos vienen adaptables a diferentes tamaños, sin embargo es recomendable medirlos antes de adquirirlos.
Una de las formas de medir la circunferencia de la cabeza es colocando una cinta métrica alrededor de la misma por encima de las cejas, de manera paralela a la horizontal.
Con este número se puede verificar en una tabla que talla corresponde a los cm de circunferencia de la cabeza. De esta forma se puede escoger el casco para karate de la talla correcta, que van desde la más pequeña XS a la más grande XL.
Clasificación casco para karate
Se pueden encontrar cascos para karate que cubran solo la parte superior de la cabeza, dejando la mandíbula al descubierto, similar al estilo de una máscara más que de un casco.
Este tipo de casco da protección a los pómulos y frente, y otorgan flexibilidad permitiendo la movilidad del deportista. También hay un modelo de casco que cubre toda la cabeza incluyendo la mandíbula. Estos son completos y se usan para principiantes y niños esencialmente.
