El sojukay es un arte marcial que se desarrolló en Ecuador en el nuevo siglo XXI. Para crearla se basaron en las diferentes técnicas de otras artes marciales como karate, jiujitsu, taekwondo – para usar técnicas de llaves con manos y pies -, movimientos circulares, proyecciones y demás.
Es una mezcla de artes marciales con danza folclórica autóctona de la región andina. Su nombre Sojukay significa el camino a lo excelso y a lo exacto en idioma quichua. La integración de las personas es fundamentalmente menos violenta que en otros estilos de artes marciales más agresivas y fuertes.
La persona que lo practica debe tener una mejora en cuanto a la formación psicoemocional, ya que esta técnica colabora con la identidad nacional. Se encuentra a través de la metodología subconsciente con disciplina deportiva disminuyendo el riesgo de enfermedades y vicios.
Cuando los jóvenes y niños ecuatorianos comienzan a practicar el sojukay, aumenta la confianza en ellos mismos. También ayuda a forjar el carácter teniendo una mejora en el rendimiento tanto académico como personal, subiendo la autoestima de cada individuo para cumplir sus sueños y metas.
Este deporte otorga beneficios a cualquier edad. Las personas adultas mejoran su condición física y mental. Incluso los adultos mayores pueden realizarlo encontrando una técnica que permite que su flexibilidad aumente y disminuyan los dolores propios de la edad.
Crecimiento personal con el sojukay
Los movimientos reflejos de respuesta a un movimiento también aumentan con la práctica constante del sojukay. Además de ser una expresión artística, puede complementarse como una ayuda en cuanto al arte de la defensa personal.
Como en muchas otras disciplinas de este estilo, los avances se ven reflejados en el cambio del color de los cinturones a medida que los practicantes mejoran. No solamente lo hacen con las técnicas del sojukay en sí, sino que mejoran a nivel mental, físico y personal.
Los significados de los colores de los cinturones en el sojukay vienen marcados por los colores de la naturaleza, simbolizando el proceso de maduración de una persona en cuanto a su crecimiento espiritual y físico.
Adoptan los valores del respeto, la disciplina, la constancia, la lealtad y el honor para ellos y también con respecto a las personas de su entorno.
Las demostraciones del sojukay permiten hacer movimientos de exhibición, solo con el cuerpo, con armas como el chasquihuasis, el tumi, la lanza de oriente, y otras armas autóctonas de la zona ecuatoriana.
Los combates y exhibiciones pueden hacerse con música o sin ella, pero si es ambientada deben ser con melodías autóctonas del Ecuador. Las peleas son de impacto, de marcación y de contacto, como el resto de las artes marciales conocidas.
Al practicar cualquier modalidad de arte marcial como el sojukay se tiende a mantener orden en muchos aspectos de la vida cotidiana, así como en la parte emocional y mental del individuo.
Estas técnicas acompasadas con música y movimientos tradicionales permiten desarrollar destrezas deportivas que influyen en el estado de salud de manera positiva, ya que estimula un estilo de vida con mejoras en todo nivel.
